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Coronavirus: No tengáis miedo

por
José Manuel Casado Sierra
en la fecha 17-03-2020
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El virus coronavirus debe ser terrible teniendo en cuenta la reacción contundente de los gobiernos y el pánico generalizado de la población. Ahora es habitual toparse con aglomeraciones en los supermercados de gente cegada por el miedo como si fuera el fin del mundo comprando como si ya no hubiera mañana ni abastecimientos. Cada vez hay más ciudadanos en la calle con mascarilla y guantes. Se recomienda pagar con tarjeta porque dicen que el dinero en efectivo puede estar contaminado por el virus. Los gobiernos reaccionan imponiendo normas y leyes que debe acatar la población a riesgo de ser multados o sancionados con penas de cárcel. En España, el presidente del gobierno declaró el estado de alarma que implica entre otras cosas  la confinación de los ciudadanos en sus casas, la limitación de la libertad de circulación de las personas durante los próximos quince días naturales y el cierre de casi todas las empresas, comercios, bares, restaurantes, discotecas, etc. Los medios de comunicación informan diariamente que cada día  aumentan los contagios  y las muertes causadas por este peligroso virus. Las calles están vacías.  Las competiciones deportivas de todas las especialidades se han suspendido. Las fronteras se cierran. La Unión Europea amenaza con el inicio de una recesión y una crisis peor que la acontecida en 2008. La Bolsa se hunde a niveles nunca vistos. Las empresas van a sufrir un revés terrible que provocará cierre de negocios, despidos, más paro, etc.  La OMS (La Organización Mundial de la Salud) declaró hace unos días que estamos ante una pandemia a nivel mundial (Se trata de la primera vez que una epidemia causada por un coronavirus es considerada como pandemia, que según la OMS se define como "la propagación mundial de una nueva enfermedad". La pregunta es, ¿por qué ahora sí lo considera una pandemia?).

 

Ante estos hechos es normal que podamos concluir que estamos ante un virus terrorífico con un nivel de contagio nunca visto que provoca miles de muertes en todo el mundo y debemos tomar medidas drásticas y contundentes para parar su propagación. Sin embargo, si mantenemos la calma, aplicamos el sentido común, usamos la racionalidad, puede que lo que parece tan horroroso no lo sea.

 

¿Cuántos habitantes alberga el planeta tierra? Unas 7.500 millones de personas.

 

¿Cuántas personas dice la  OMS que se han infectado y han muerto por el virus? Dicen que se han infectado más de 150.000 personas y han muerto más de 5.000.

 

¿Qué supone  150.000 personas infectadas y 5.000 muertas respecto a 7.500 millones de habitantes de la tierra? 0,002% de infectados y un 0.00006666666% de muertes. Ante estos porcentajes tan tan tan pequeños, ¿se puede considerar que el virus es terrorífico?¿Una epidemia?¿Una pandemia?

 

Centrémonos en España. A día de hoy hay unos 7.900 personas infectadas y 300 personas fallecidas. ¿Qué supone  estos datos respecto a los 47 millones de habitantes que tiene España? 0,016% de infectados y 0.00063 % de muertes. Ante estos porcentajes tan tan tan pequeños, ¿se puede considerar que el virus es terrorífico y justificar el pánico  las autoridades y la población?

 

Retrocedamos a los años  2017 y 2018 en España. Los profesionales del CIBER de Epidemiología y Salud Pública (Ciberesp) y del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) que son  expertos que desarrollan su labor en el Grupo de Vigilancia de Gripe del Centro Nacional de Epidemiología y del Laboratorio de Gripe y virus respiratorios del Centro Nacional de Microbiología, han estimado en el resumen de la temporada de gripe 2017-2018 que cerca de 800.000 personas en España padecieron la enfermedad. De ellas, 52.000 tuvieron que ser ingresadas y cerca de 15.000 fallecieron. El principal grupo de riesgo fueron personas mayores de más de 64 años.  Ante estos datos de contagios y fallecimientos por la gripe estacional en ese periodo en España , ¿por qué los medios de comunicación no se hicieron eco y no estuvieron difundiendo cada hora que eso era terrible, muy contagioso y debíamos no salir de casa como lo están haciendo ahora?¿ Por qué el gobierno español no tomó medidas y declaró el estado de alarma? ¿Por qué ahora con el virus que llaman coronavirus sí?

 

A nivel mundial, según la OMS al año entre 290.000 y  650.000 personas pueden morir debido a enfermedades respiratorias relacionadas con la gripe estacional. Las principales víctimas son personas mayores de 75 años  y en las regiones más pobres del mundo. De hecho, África subsahariana representa el mayor riesgo de mortalidad por gripe del mundo, seguido del Mediterráneo oriental y del sudeste asiático. Salvo error mío no recuerdo que se haya declarado una pandemia por la gripe estacional y los gobiernos y prensa hayan informado que esto es terrible y debemos no salir de casa.

 

Según la OMS la gripe estacional  es una infección vírica que afecta principalmente a la nariz, la garganta, los bronquios y, ocasionalmente, los pulmones. La infección dura generalmente una semana y se caracteriza por la aparición súbita de fiebre alta, dolores musculares, cefalea y malestar general importante, tos seca, dolor de garganta y rinitis. El virus se transmite con facilidad de una persona a otra a través de gotículas y pequeñas partículas expulsadas con la tos o los estornudos. La gripe suele propagarse rápidamente en forma de epidemias estacionales.

 

La mayoría de los afectados se recuperan en una o dos semanas sin necesidad de recibir tratamiento médico. Sin embargo, en niños pequeños, personas de edad y personas aquejadas de otras afecciones médicas graves, la infección puede conllevar graves complicaciones de la enfermedad subyacente, provocar neumonía o causar la muerte.

 

Ante estos datos de la gripe estacional indicados en líneas precedentes, ¿por qué los gobiernos y los medios de comunicación no han difundido a la población que la gripe estacional es muy contagiosa, puede matar, se deben extremar  las medidas para evitar el contagio, no se debe salir de casa y hay que paralizar los comercios?

 

En España, mueren anualmente por enfermedades cardiovasculares y tumores (cáncer), más de 230.000 personas y en el mundo ¡¡más de 26 millones!! ¿Por qué no se consideran epidemias y pandemias?¿Por qué el gobierno y los medios de comunicación no hablan de ello cada día alarmando a la población? 

 

Centrémonos en el coronavirus (COVID-19). Vayamos a la web oficial de la OMS y recopilemos la información oficial sobre este virus. La OMS define que los coronavirus (se descubrieron en la década de los 60 del siglo pasado)  como una extensa familia de virus que pueden causar enfermedades tanto en animales como en humanos. En los humanos, se sabe que varios coronavirus causan infecciones respiratorias que pueden ir desde el resfriado común hasta enfermedades más graves como el síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS) y el síndrome respiratorio agudo severo (SRAS). El coronavirus que se ha descubierto más recientemente causa la enfermedad por coronavirus  COVID-19 y ambos eran desconocidos antes de que estallara el brote en Wuhan (China) en diciembre de 2019.


Los síntomas más comunes de la COVID-19 son fiebre, cansancio y tos seca. Algunos pacientes pueden presentar dolores, congestión nasal, rinorrea, dolor de garganta o diarrea. Estos síntomas suelen ser leves y aparecen de forma gradual. Algunas personas se infectan pero no desarrollan ningún síntoma y no se encuentran mal. La mayoría de las personas (alrededor del 80%) se recupera de la enfermedad sin necesidad de realizar ningún tratamiento especial. Alrededor de 1 de cada 6 personas que contraen la COVID-19 desarrolla una enfermedad grave y tiene dificultad para respirar. Las personas mayores y las que padecen afecciones médicas subyacentes, como hipertensión arterial, problemas cardiacos o diabetes, tienen más probabilidades de desarrollar una enfermedad grave. En torno al 2% de las personas que han contraído la enfermedad han muerto.

Hay estudios que están de acuerdo con la OMS de que el coronavirus afecta más a las personas mayores y a aquellas que padecen determinadas enfermedades crónicas, como hipertensión, diabetes y afecciones cardiovasculares. Según un estudio sobre las características clínicas de pacientes chinos, publicado en la revista 'The New England Journal of Medicine', el 73,3% de los fallecidos padecía otras enfermedades.

Las autoridades sanitarias advirtieron desde el inicio del brote de coronavirus que muchos de los casos graves eran de pacientes con hipertensión, diabetes o enfermedades cardiovasculares. Algunos de estos enfermos están en la lista de fallecidos, aunque no a causa de la enfermedad, sino porque el efecto de ésta es agravar patologías ya existentes. Por tanto, muchas personas  que dicen que fallecen por el coronavirus, tenían ya patologías graves, es decir, su estado clínico grave no lo provocó el coronavirus si no sus patologías graves previas.

La OMS dice que el riesgo de contraer la enfermedad depende del lugar donde se encuentre usted y, más concretamente, de si se está produciendo un brote de COVID-19 en dicho lugar. Para la mayoría de las personas que se encuentran en la mayor parte de los lugares, el riesgo de contraer esta enfermedad continúa siendo bajo.

 

Según el especialista en enfermedades infecciosas e investigador del Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal), Oriol Mitjà, considera que el nuevo coronavirus ha causado alarma porque es nuevo y no porque sea grave, ya que este virus «es muy leve y no hay riesgo para toda la población», según declaraciones recogidas por Efe este 13 de febrero. Más de 95% de las personas que enferman se recuperan.

A pesar de que la OMS y la mayoría de autoridades sanitarias nos dicen que si te infectas por el coronavirus Covid-19 los  síntomas suelen ser leves (fiebre, cansancio, tos seca), y aparecen de forma gradual; que la mayoría de las personas (alrededor del 80%) se recupera de la enfermedad sin necesidad de realizar ningún tratamiento especial y únicamente un 2% de las personas infectadas sobre todo personas mayores y con patologías graves previas, pueden morir, los gobiernos y la población entra en pánico y se olvidan del sentido común. Muchas personas ahora enferman, porque entran en pánico, lo cual debilita al sistema inmunitario. Además, duermen y comen peor, debilitando al cuerpo.

Por ejemplo, ahora es habitual ver a más gente con mascarilla en la calle, en los supermercados, etc., pero ¿se debe llevar la mascarilla para protegerse? Según la OMS si no se presentan los síntomas respiratorios característicos de la COVID-19 (sobre todo, tos) o no se cuida de una persona que pueda haber contraído esta enfermedad, no es necesario llevar puesta una mascarilla clínica. Hay que utilizarlas de forma sensata. Solo deben usar mascarilla los trabajadores sanitarios, los cuidadores y las personas con síntomas respiratorios como fiebre y tos. Además, la mascarilla puede dificultar la respiración y ésta humedece la mascarilla concentrándose más bacterias.

Ahora la gente acude  a los supermercados como si fuera una sala de cirugía, llevando puestos mascarillas y guantes para así “evitar el contagio”, sin embargo, Fernando Simón, director del Centro de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad ha señalado que no es necesario acudir con guantes al supermercado, aunque sí usarlos al coger fruta como habitualmente. Por el tema del coronavirus de ahora la gente se preocupa por no contagiarse, sin embargo, olvida que en sus cuerpos hay millones de bacterias, también en el ambiente donde viven y los alimentos que consumen. Conviven con ellas cada segundo de sus vidas. Las bacterias, los gérmenes son omnipresentes, están en todas partes y son necesarias para que funcione nuestro organismo, el reino vegetal y animal. Si estuviéramos libres de estos diminutos organismos, moriríamos pronto. Desempeñan muchos servicios simbióticos y esenciales para nosotros y el resto de seres vivos. Sin las bacterias la tierra estaría plagada de cadáveres. Gracias a ellas la materia muerta es transformada y descompuesta en formas más simples y adecuadas para el nutrimento de la vegetación. Lo mismo hacen en nuestro cuerpo. Es imposible y no recomendable vivir en un ambiente sin bacterias.

 

Cada día nos dicen que hay cientos de nuevos casos de personas infectadas por el coronavirus. Entendemos que a cada persona que la diagnostican con COVID-19 es porque le han hecho el test y ha salido positivo porque uno de los problemas en un brote epidémico es tener una manera uniforme de contar los casos. Al principio, China no confirmaba un caso hasta tener los resultados de los test de detección, lo que podía retrasar la acción. Desde la segunda semana de febrero, China empezó a usar un nuevo método, lo que ha hecho que se dispare la estadística. El Gobierno de China da, así, más atribuciones a los médicos para determinar si una persona, con un cuadro de síntomas compatible con la infección, junto a datos de exposición, es seria candidata a portar el virus, ser contagiosa y engrosar las listas de casos. Entendemos que en España esto no sucede y que únicamente eres diagnosticado con COVID-19 si te hacen previamente el test y éste sale positivo y no porque tengas síntomas. Además, como dijo en el programa de Antena 3 Espejo Público, el día 13 de marzo de 2020, Emilio Bouza Catedrático de la Facultad de Medicina de la UCM no hay que hacer un test a una persona que esté asintomática. La presentadora del programa le expuso un caso de una joven de 25 años con síntomas que qué tendría que hacer. El catedrático expuso que hay que actuar ante el coronavirus de tal forma que no sea peor el remedio que la enfermedad. Aconsejó que la joven pudiera estar en su habitación pero que interactuara con el resto de los familiares de forma normal, razonable para comer, etc.

Las autoridades sanitarias también recalcan que es importante no acudir a los servicios sanitarios cuando tengamos tos o algo de fiebre porque, ese es el problema, vamos a saturar a las urgencias y a los profesionales sanitarios que hay que recordad que a parte del coronavirus, cada día hay otras personas con patologías graves como problemas cardíacos, cáncer, diabetes, etc., que hay que atender. En España mueren cada año más de 120.000 personas por enfermedades cardíacas y miles por cáncer. Muchas personas que padecen estas enfermedades hay que ayudarlas también.

 

Según la OMS la enfermedad COVID-19 puede propagarse de persona a persona a través de las gotículas (más que por el aire) procedentes de la nariz o la boca que salen despedidas cuando una persona infectada tose o exhala. Estas gotículas caen sobre los objetos y superficies que rodean a la persona, de modo que otras personas pueden contraer la COVID-19 si tocan estos objetos o superficies y luego se tocan los ojos, la nariz o la boca. También pueden contagiarse si inhalan las gotículas que haya esparcido una persona con COVID-19 al toser o exhalar. Por eso es importante mantenerse a más de 1 metro (3 pies) de distancia de una persona que se encuentre enferma.

Hay varias precauciones que a conseja la OMS que se pueden adoptar para reducir la probabilidad de contraer o de contagiar la COVID-19:  

  • Lávese las manos a fondo y con frecuencia usando un desinfectante a base de alcohol o con agua y jabón porque mata los virus que pueda haber en sus manos.
  • Mantenga una distancia mínima de 1 metro (3 pies) entre usted y cualquier persona que tosa o estornude.
  • Evite tocarse los ojos, la nariz y la boca porque las manos tocan muchas superficies y pueden recoger virus. Una vez contaminadas, las manos pueden transferir el virus a los ojos, la nariz o la boca. Desde allí, el virus puede entrar en su cuerpo y causarle la enfermedad.
  • Tanto usted como las personas que les rodean deben asegurarse de mantener una buena higiene de las vías respiratorias. Eso significa cubrirse la boca y la nariz con el codo doblado o con un pañuelo de papel al toser o estornudar.
  • Permanezca en casa si no se encuentra bien. Si tiene fiebre, tos y dificultad para respirar, busque atención médica y llame con antelación. Siga las instrucciones de las autoridades sanitarias locales.



Escuchando diariamente a  los medios de comunicación y los gobiernos parece que no podemos hacer nada ante este virus, salvo lavarnos las manos con frecuencia, cubrirse la boca con el codo o con un pañuelo de papel al toser y mantener una distancia de, al menos, 1 metro con las personas que tosen o estornudan. Es un virus terrible, muy contagioso. Lo ponen como si el organismo de cada persona no tuviera ningún poder y al contagiarse el cuerpo se resignara a su suerte y no pudiera reaccionar para salvarse.

 

 

Nuestro cuerpo es autocurativo. Realiza diariamente cuatrillones de procesos de forma controlada e inteligente. Posee una inteligencia, una sabiduría, un poder superior que escapa a nuestra capacidad de imaginación. Está formado por más de 75 billones de células que se encuentran en todas las partes del organismo. Su función consiste en producir energía y fabricar los componentes del cuerpo. Dentro de ellas se producen más reacciones químicas que todas las fábricas químicas del mundo. Aquellas células que no son de la mejor calidad posible son reemplazadas al instante por otras de una calidad superior. Cada segundo se reemplazan cerca de 50 millones, de esta forma, el número de ellas se mantiene siempre estable. Aunque cada célula está especializada en una tarea determinada, muchas de ellas deciden agruparse con sus compañeras inmediatas formando los tejidos. Estos tejidos forman los órganos, estómago, hígado, corazón, pulmones, etc., que a su vez constituyen sistemas del cuerpo, un conjunto de órganos que desempeñan funciones más o menos semejantes como el sistema digestivo, sistema cardiovascular, sistema respiratorio, sistema inmunitario, etc. Todo nuestro cuerpo es una unidad destinada a que nuestras células vivan lo mejor posible. Posee canales de eliminación de toxinas y desechos celulares como las vías respiratorias, la piel, los riñones, los intestinos. Puede aumentar la temperatura (fiebre) para quemar las toxinas. A través de la tos y los mocos puede también eliminar toxinas. Alberga millones de glóbulos blancos capaces de hacer frente a sustancias o agentes tóxicos y llevarlos a los canales de eliminación. Todos los órganos  y sistemas cooperan para su completo bienestar, en una estrecha dependencia entre ellos.  Creer que nuestro cuerpo no tiene los medios y poder para enfrentarse al coronavirus, algo inmensamente pequeño (necesitamos microscopios para indentificarlos), no tiene mucha lógica. Nuestro cuerpo tiene la capacidad inhata de curarse a sí mismo y eliminar los virus.

Es importante cuidarse para que nuestro cuerpo tenga un nivel de energía alto, menos toxinas y de esta forma pueda funcionar más eficientemente. Respirar aire limpio. Beber agua en vez de otras sustancias. Comer más frutas y verduras pues aportan mucha energía junto a muchas vitaminas y minerales necesarios para los procesos metabólicos y curativos del organismo. Comer alimentos naturales y no procesados para nutrirnos mejor. Evitar las comidas copiosas que agotan al sistema nervioso y al aparato gastrointestinal. Descansar durmiendo muchas horas hace que el organismo se recupere. Tomar algo de luz solar favorece mucho a la circulación sanguínea y al sistema inmunitario. Tener una actitud positiva para disminuir la ansiedad y el estrés que perjudican mucho la salud de las células. Si tu cuerpo está sano y emocional y psicológicamente consigues tranquilizarte, la probabilidad de enfermar es mucho menor y tu organismo puede hacer frente al coronavirus de forma más efectiva.

Esta crisis del coronavirus pasará pero si seguimos viviendo de una manera tan estresante donde predominan muchos hábitos de vida insanos, las próximas crisis sanitarias serán de mayor impacto y más difíciles de superar. Las necesidades básicas de nuestro cuerpo son respirar aire limpio, beber agua, comer alimentos sanos, dormir, tomar el sol y la higiene. Si seguimos contaminando el aire y el agua. Si predominan en nuestras dietas alimentos procesados y repletos de colesterol. Si no dormimos lo suficiente. Si apenas recibimos la luz solar. Si seguimos enganchados a Internet pasando horas delante del móvil desconectándonos de la realidad. Si predominan en nuestra mente pensamientos negativos que nos hacen sufrir y nos alejan de la felicidad. Si nos valoramos por lo que tenemos en vez de por ser. Si nos distanciamos de los demás y actuamos con egoísmo, entonces, nuestro nivel de salud será bajo y debilitaremos el poder de nuestro cuerpo y , así, enfrentarse y liberarse de otros coronavirus será más complicado.

Quiero añadir un video muy interesante sobre otra visión sobre esta crisis del coronavirus por parte del conocido doctor en medicina e Higiene Vital el Dr. Karmelo Bizkarra. Lo importante no es el virus si no nuestra forma de vivir insana. Si estamos sanos no hay terreno para los virus...



Recomiendo encarecidamente ver el siguiente video del ilustre doctor americano Michael Klaper. El Dr. Michael Klaper es un médico de reconocido prestigio internacional y un conferenciante muy solicitado sobre dieta y salud. Él cree que una nutrición adecuada, a través de una dieta basada en alimentos integrales y vegetales, y un estilo de vida equilibrado son esenciales para la salud.

En este caso, en su video, nos comenta que el origen del virus coronavirus COVID-19, son los murciélagos consumidos en China. Explica el proceso de la enfermedad, que es leve para la mayoría de las personas y aquellas con patologías respiratorias, diabetes o con debildiad orgánica, pueden desarrollar complicaciones severas. Aconseja una dieta vegetal y hace una reflexión a la humanidad para que nos demos cuenta que somos comedores de alimentos vegetales y no de animales, los cuales, pueden albergar virus muy patógenos. El video es en inglés pero puedes poner subtítulos en español en el apartado de configuración.



Las siguientes páginas hablan del posible origen del virus en los murciélagos:



Gracias por leer mi artículo y espero que pueda serte de ayuda y motivación.
José Manuel Casado Sierra.-

 

 

Fuente:

 




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