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Artículos espiritualidad: en general

El método mantener la llama
por Angeles Saloa
Publicado el 14-06-2012

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O tambien se podría decir "cultivar el gozo".Porque amigos, así como es necesario regar una planta para que florezca y resplandezca a la luz del sol y al mundo; lo mismo ocurre con nosotros, semillas potenciales de luz que, ocultas tras la maraña de pensamientos sin pausa, creemos ser aquello que pensamos o sentimos.

El líquido que se aposenta en el fondo de nosotros, es cristalino y tiene luz, y generalmente, nada tiene que ver con lo que pensamos que somos.

Cultivar el gozo, es descender al remanso pristino, que reposa en nuestro fondo, por encima de la forma o la apariencia.Beber nuestra propia esencia, la que viene de la fuente infinita y eterna, a la que estamos conectados a pesar de nosotros mismos.

Podemos dar candela a nuestro Ser y mantener la llama interna activa, si enfocamos nuestra voluntad en este propósito. Para conseguirlo propongo poner en práctica el método más abajo descrito.

Cuando consigamos dominarlo, flores etéricas crecerán a nuestro paso, y cascadas de luz se derramarán en nuestro ambiente. Otras personas lo notaran al pasar por la estela que dejaste, tal vez sonrían sin saber porqué, o quizá sean conscientes por primera vez de la belleza de una flor.

Este viejo y sencillo proceder, encierra un secreto que sólo se descubre cuando se para y cuando se calla, es un secreto que se revela en la soledad de cada uno, sin estridencias, un nectar de autentica vida se ira derramando suave y dulcemente sobre tí. Entrégate sin resistencia porque ese sí que serás tú.

Es importante la constancia, ya que una bella planta no florece de un día para otro, pero llegado el momento merece la pena el empeño:

1.- conectar con nuestra respiración:

Se trataría tan sólo de respirar a lo largo del día tres o cuatro veces de manera consciente, si son diez veces mejor. Es decir, dejar todo lo que estemos haciendo en ese momento y tomar consciencia del acto de respirar. Si te pones demasiado nervioso/a, es una muestra de tu adicción al pensamiento descontrolado o a tu incapacidad para desconectar y decidir la calidad de tus momentos.

En el instante de tomar aire, seremos conscientes de que nuestros pulmones cogen energía viva de la atmosfera sin que intervengamos y después lo devolvemos al cielo confiados y agradecidos.

Respirar así, no sólo es respirar. Es tomar consciencia de nuestro aquí y ahora, parar un instante nuestra mente llena de tareas que nos alejan de lo único que realmente poseemos: el presente.

Poco a poco, si tenéis un poco de paciencia, este sencillo ejercicio se convertirá en un hábito que abrirá un espacio en vosotros que antes no estaba, cuando hacemos espacio dentro de nosotros, permitimos que la luz emerga y la llama del gozo aflore expontaneamente.

No obstante, este lugar tan especial, requiere especiales cuidados hasta que se instale definitivamente en nuestro cuerpo y mente. Como las plantas de tu jardin necesitará la frescura sutil de tu aliento, una inspiración que abarque el universo y una expiración de dulce entrega.

A veces, queridos amigos, el tesoro mas grande lo guardan pequeñas llaves.

DATOS SOBRE EL/LA AUTOR/A
  • Su nombre: Angeles Saloa.
  • Su e-mail: saloa@telefonica.net
  • Su página web: http://www.telefonica.net/web2/saloa
  • Su experiencia: "Soy artista plástica y escritora, he publicado dos novelas 'El laberinto de las mil puertas' y 'La ninfa del pelo azul'. Actualmente trabajo en una tercera, sobre un viaje iniciático a la india, de aventura y búsqueda espiritual. Paralelamente hago exposiciones de pintura. Tambien, tengo la maestría en Reiki, organizo grupos de intecambio de reiki y cursillos de iniciación, Así como grupos de meditación Zen."
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